10 Diciembre de 2025 12:23
La hija de la dirigenta venezolana María Corina Machado, Ana Corina Sosa Machado, leyó un discurso de su madre en Oslo, en el marco de la entrega del Premio Nobel de la Paz 2025 que recibió por la resistencia contra el régimen de Nicolás Maduro. En el marco de las presiones de Estados Unidos (EE.UU) y las amenazas directas de Donald Trump de invadir el país sudamericano, la referente adelantó lo que se viene para la región: "Si queremos tener democracia, debemos estar dispuestos a luchar por la libertad".
"He venido a contarles una historia, la historia de un pueblo y su larga marcha hacia la libertad. Esa marcha me trae hoy aquí, como una voz entre millones de venezolanos que se han levantado una vez más para reclamar el destino que siempre les ha pertenecido", fueron las primeras palabras que leyó la hija de Corina Machado, quien luego repasó un poco el origen histórico de su país.
"Incluso la democracia más fuerte se debilita cuando sus ciudadanos olvidan que la libertad no es algo que debamos esperar, sino algo a lo que debemos dar vida. Es una decisión personal, consciente, cuya práctica cotidiana moldea una ética ciudadana que debe renovarse cada día", explicó más adelante, todavía sin adentrarse en las críticas directas contra el régimen de Maduro.
"Este premio tiene un significado profundo: le recuerda al mundo que la democracia es esencial para la paz. Y lo más importante, el principal aprendizaje que los venezolanos podemos compartir con el mundo es la lección forjada a través de este largo y difícil camino: si queremos tener democracia, debemos estar dispuestos a luchar por la libertad", aseguró casi como un adelanto a la invasión norteamericana con la que amenazan desde la Casa Blanca. "La libertad se conquista cada día, en la medida en que estemos dispuestos a luchar por ella", sintetizó después.
La libertad se conquista cada día, en la medida en que estemos dispuestos a luchar por ella
En la lectura del discurso se aseguró que "Venezuela volverá a respirar" y se prometieron cambios radicales. "Abriremos las puertas de las cárceles y veremos salir el sol a miles de inocentes que fueron encarcelados injustamente, abrazados al fin por quienes nunca dejaron de luchar por ellos. Veremos a las abuelas sentar a sus nietos en sus piernas para contarles historias, no de héroes lejanos, sino del valor de sus propios padres", aseguró.
"Veremos a nuestros estudiantes debatir con pasión, sin miedo, con sus voces al fin libres. Volveremos a abrazarnos, a enamorarnos, a oír nuestras calles llenas de risas y de música. Todas las alegrías simples que el mundo da por sentadas volverán a ser nuestras", auguró Machado, sin tener en cuenta el costo en vidas, infraestructura y sometimiento de cara a los r recursos naturales que significaría una invasión militar norteamericana.

Más antes en su discurso apuntó contra el ex presidente Hugo Chávez, a quien definió como "el cabecilla de un golpe militar contra la democracia" sobre el cual "muchos pensaron que el carisma podía sustituir el Estado de derecho". "Desde 1999, el régimen se dedicó a desmantelar nuestra democracia: violó la Constitución, falsificó nuestra historia, corrompió a las Fuerzas Armadas, purgó a los jueces independientes, censuró a la prensa, manipuló las elecciones, persiguió la disidencia y devastó nuestra biodiversidad", rechazó.
Según expuso, en esos años "la economía colapsó más de un 80%, la pobreza superó el 86%, y nueve millones de venezolanos se vieron obligados a huir". "Nos asfixiaron, nos encarcelaron, nos mataron, nos empujaron al exilio", añadió. "La migración forzada, que buscaba fracturarnos, terminó uniéndonos en torno a un propósito sagrado: reunir a nuestras familias en nuestra tierra", sumó después.
Desde 1999, el régimen se dedicó a desmantelar nuestra democracia
De acuerdo al discurso de Machado, en las últimas elecciones "Edmundo González ganó con el 67% de los votos, en cada estado, ciudad y pueblo". "Todas las actas contaban la misma historia. En cuestión de horas logramos digitalizarlas y publicarlas en una página web, para que el mundo entero pudiera verlas", recordó. Sin embargo, el régimen de Maduro no aceptó la derrota y manipuló los resultados.
"La dictadura respondió aplicando el terror. 2.500 personas fueron secuestradas, desaparecidas o torturadas. Marcaron sus casas, tomaron a familias enteras como rehenes. Sacerdotes, maestros, enfermeras, estudiantes: todos perseguidos por compartir un acta electoral. Crímenes de lesa humanidad, documentados por las Naciones Unidas; terrorismo de Estado, usado para enterrar la voluntad del pueblo", protestó Machado

"A más de 220 adolescentes detenidos tras las elecciones los electrocutaron, golpearon y asfixiaron hasta forzarlos a decir la mentira que el régimen necesitaba difundir: que habían sido pagados por mí para protestar. Mujeres y adolescentes encarceladas siguen hoy sometidas a esclavitud sexual, obligadas a soportar abusos a cambio de una visita familiar, una comida o el simple derecho a bañarse", denunció después.
Al mismo tiempo, antes de cerrar advirtió que "durante estos dieciséis meses en la clandestinidad" construyeron "nuevas redes de presión cívica y de desobediencia disciplinada", con el fin de prepararse "para una transición ordenada hacia la democracia". Ahora resta que se cumpla la otra parte de su voluntad y que EEUU sea la garantía para terminar con el terror del régimen de Maduro. En ningún momento del discurso se refirió al costo que tendrá para su país esa jugada.

