06 Julio de 2015 07:39
En la casa de Gran Hermano no pueden ganar las pruebas semanales. Cada semana luchan por administrar la comida y es un factor determinante ya que se generan peleas y eternas discusiones sobre cómo lograr que alcancen los alimentos. Esta semana volverán a padecer la escasez
Durante el fin de semana recibieron las indicaciones sobre el desafío que se llamó “No te duermas”. La misma obligaba a los hermanitos a mantenerse en grupos dentro del cuarto rojo, sin dormir durante 48 horas y permaneciendo sentados.
Pero Marian, inquieta por demás, no logró quedarse en su lugar y la prueba quedó finalizada. En la casa se inició una batalla contra la novia de Brian y pese a sus pedidos de disculpas, ahora la culpan de tener que comprar comida sólo con el 70% del presupuesto, ya que apostaron el 30% creyendo que era algo “muy simple de realizar”.
En la historia de Gran Hermano, el actual grupo de participantes son los que menos pruebas realizaron correctamente. Sólo ganaron dos pruebas: la de preparar y cocinar 90 docenas de empanadas y la de la semana pasada donde realizaron la coreografía de los Backstreet Boys.
En uno de los desafío en los que creyeron que ganarían mucho dinero fue el de “atender un teléfono” pero por una distracción tampoco lo cumplieron.
La peor de todas las situaciones es perder una prueba con intención. Y es lo que genera Matías: en “Unidos”, desafío en el que debían permanecer atados con una soga cada dos participantes, el rebelde simuló no poder abrocharse un brazalete y todos quedaron fuera de juego.
También tuvieron pruebas donde se les exigió andar en bicicleta para demostrar su habilidad física.
Las anteriores ediciones de GH los participantes no arriesgaban la prueba semanal como parte de la estrategia de juego, situación que sí sucede en esta oportunidad, porque varias veces Matías provocó que se pierda la posibilidad de aumentar el presupuesto y comprar más comida.
Ahora deberán esperar que el miércoles, en la gala de eliminación, les envíen comida y ver cómo la adminstran. Las más afectadas son Maypi y Angie ya que cuando hay poco dinero se compran más productos con harina y carne y ellas son vegetarianas. Como la verdura es más cara y menos saciadoras deben adaptarse al menú low cost.