27 Octubre de 2015 08:44

“Estamos re contentos de cumplir diez años de amor. Queremos casarnos pero no este año porque Benicio es tan chiquito que no puedo ni pensar en la organización de un casamiento, ni seguir agrandando la familia. Aunque no lo descartamos, somos muy padrazos”, decía Pampita hace cuatro meses. Delante de los flashes de la prensa festejaban su década de amor, pero las sonrisas duraron poco.
Los testigos del encuentro aseguraron que a Carolina “Pampita” se la vio triste.
En el último tiempo circularon rumores sobre una crisis que padecía la pareja, y hasta se la vinculó como tercera en discordia a Natalia Oreiro, compañera de trabajo de Benjamín, en la serie Entre Caníbales. Pese al esfuerzo de ambos para que no llegue sus trapos sucios a ser tapa de revistas, la separación es un hecho.
La pareja celebró 10 años de amor pero ahora enfrentan la separación.
Se confirmó que viven en casas separadas. Ella en vive junto a sus tres hijos en el barrio de Nuñez, sobre la calle Mendoza al 1100. En cambio él está solo en el Vilas Club. Esta semana, Vicuña desde su cuenta de Twitter solicitó “respeto” a los medios para que no hablen del tema.
En la tarde de ayer, Carolina y Benjamín se encontraron para conversar y BigBang logró tener una imagen de ese momento. Los testigos aseguraron que se veía una expresión de tristeza en el rostro de Pampita.
Benjamín y Carolina a solas dialogaron con seriedad. Una cumbre en medio de la crisis.
Incluso en la fiesta de celebración de la década de amor trascendió que la pareja discutió antes de iniciar la recepción a los invitados. Según informó La Pavada de Crónica, todo ocurrió tras bambalinas.
“Son mis hijos y con ellos hago lo que quiero
Resulta que el actor chileno no quería mostrar a sus hijos a la prensa, a lo que la modelo le habría respondido: “Son mis hijos y con ellos hago lo que quiero”. Finalmente y después de varios minutos de tensión, Pampita ganó la pulseada y salieron los cinco a enfrentar a los fotógrafos. Pero ahora parece que ninguno quiere ceder y se podría profundizar la crisis. Pero quizás el encuentro sea para iniciar una reconciliación. ¿Hay segunda oportunidad? Habrá que esperar para saberlo...