15 Diciembre de 2025 12:17
La calma del domingo se quebró pasadas las 22.20, cuando un incendio de gran magnitud se desató en el Parque Ferroviario ubicado en Moldes al 800, entre Palpa y Aguilar, a metros de la estación Colegiales del ferrocarril Mitre. En un predio a cielo abierto donde se acumulan formaciones ferroviarias fuera de servicio, el fuego avanzó con rapidez y generó una densa columna de humo gris visible desde distintos puntos del barrio.
Las llamas, de un intenso color rojizo, contrastaban con la oscuridad de la noche y se elevaron sobre los vagones abandonados, mientras vecinos observaban con preocupación y registraban con las cámaras de sus celulares una escena que parecía sacada de una película apocalíptica. En total, cinco vagones y una locomotora resultaron afectados por el incendio, en un predio donde se almacenan unas diez unidades ferroviarias fuera de uso.
Ante la magnitud del siniestro, personal de Bomberos de la Ciudad fue desplazado de urgencia y trabajó con dos líneas de 38 milímetros para atacar el foco ígneo. El operativo incluyó la intervención de efectivos de la Policía Federal y de la Comisaría Vecinal 13 C, que aseguraron la zona y evitaron riesgos mayores en un área densamente poblada. También participó el SAME, como parte del protocolo de emergencia.
El fuego logró ser controlado antes de las 23.30, según informó Trenes Argentinos, aunque el operativo se extendió hasta después de la medianoche para asegurar la extinción total y evitar posibles reinicios. A pesar del dramatismo de la escena, no se registraron víctimas ni personas heridas, y el servicio ferroviario no se vio afectado. Lo cierto es que las imágenes del incendio se propagaron rápidamente por redes sociales.
En los videos se observa el avance de las llamas, las formaciones grafiteadas envueltas en fuego y a los bomberos ingresando con trajes ignífugos para atacar directamente la raíz del incendio. La escena reavivó viejas denuncias vecinales: usuarios señalaron que el predio suele ser vulnerado por personas que cruzan el cerco de seguridad para encender fogatas, presuntamente con el objetivo de quemar el recubrimiento de cables de bronce y revender el material. Si bien esa hipótesis volvió a ganar fuerza tras el episodio, el origen del incendio permanece bajo investigación y, hasta el momento, no fue determinado de manera oficial. De esta manera, el siniestro volvió a exponer el estado de abandono de sectores ferroviarios en desuso y el riesgo latente que representan para los barrios que los rodean.

