18 Junio de 2025 12:06

En un contexto de creciente tensión política y social, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, expresó duras críticas hacia las movilizaciones que este miércoles tomaron las calles en apoyo a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Las protestas, convocadas tras la condena judicial que pesa sobre la exmandataria, se concentraron principalmente en la emblemática Plaza de Mayo, pero también se replicaron en distintos puntos del país.
"Es el intento de la tiranía de la calle. Acá hay una decisión de la Justicia, en varias instancias, de llevar adelante una investigación que terminó en un procesamiento y una condena a Cristina Kirchner", expresó Bullrich durante una entrevista en el stream La Casa.
Desesperada por ver a las masas sin control, la ministra subrayó la importancia de mantener el orden y garantizar el funcionamiento normal del país, en un día que calificó como laboral: "Hoy es un día de trabajo, donde el país tiene que producir", afirmó. Además, enfatizó que desde su cartera se está monitoreando cuidadosamente la situación en los alrededores de Plaza de Mayo y otros puntos estratégicos de la Ciudad de Buenos Aires. "Es un objetivo federal porque está la casa de gobierno, el congreso, los tribunales. Son todos lugares donde tenemos que proteger y cuidar a las instituciones", explicó.
En línea con esta postura, Bullrich confirmó que se descontará el día a los empleados estatales: "La gente tiene que hacer lo que hace todos los días. No puede variar la calle, la vida, el estudio, la vida escolar de todos los argentinos porque un determinado sector político toma la decisión de hacer una manifestación", aseguró.
Sin embargo, las calles cuentan otra historia. Miles de personas se movilizaron para expresar su apoyo a CFK y su rechazo a su proscripción judicial que la sacó de la cancha electoral de las próximas elecciones. Las consignas, los cánticos y el fervor popular resonaron con fuerza en plazas y avenidas con un clima social efervescente que desafía de todas maneras a las fuerzas del cielo.
Bullrich no dejó lugar a dudas sobre su interpretación del fenómeno: "Ellos creen que pueden estar en la calle 1, 2, 10, 20 días y así van a poder tomar el poder". Según la ministra, estas movilizaciones buscan desestabilizar al Gobierno y atentar contra las instituciones democráticas del país: "Esto muestra que el kirchnerismo tiene una manera de actuar que está totalmente al filo de las actitudes democráticas", sentenció bastante nerviosa.
La funcionaria también defendió el rol de las instituciones y del sistema republicano frente a lo que considera una falta de respeto por parte de los manifestantes: "Acá hay un Presidente que ganó las elecciones, procesos electorales en todos lados. Acá hay una democracia y un sistema republicano que tiene 3 poderes. Esta fue una decisión de la Justicia con una investigación de 17 años. Si no van a respetar las instituciones, ¿qué es lo que quieren? ¿estar por afuera?", cuestionó.
En cuanto al operativo desplegado para garantizar el orden público, Bullrich aseguró estar trabajando en conjunto con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para monitorear los ingresos y evitar bloqueos importantes: "Por el momento, los ingresos funcionan normalmente", señaló y, consultada sobre la posibilidad de aplicar el protocolo antipiquetes para despejar las calles cercanas a Plaza de Mayo, Bullrich fue cautelosa: "Con esos números [de manifestantes] no. Se pueden lograr algunas cosas: que no corten ciertos puentes, que no corten la 9 de Julio... Depende mucho del nivel de gente que haya, si vienen por muchos puntos distintos".
Finalmente, la ministra Patricia Bullrich cerró con un mensaje dirigido a quienes acompañan a Cristina Fernández de Kirchner: "A eso le vamos a contestar con el orden, con la ley y vamos a decirle a la sociedad que este tipo de formas no es el tipo de formas que le sirve al país que está con una inflación baja, que está logrando objetivos y que esto intenta generar un ambiente de inestabilidad".