10 Diciembre de 2019 10:02
Las hijas de la reina de Holanda, Máxima Zorreguieta, distan de pasar su mejor momento; al punto tal que la Corona montó un operativo especial para poder empezar a sobresaltar el bullyng que recibe la mayor del matrimonio, Catharina Amalia (17), por su sobrepeso, y los celos de su hermana menor, Alexia, por la atención que considera que deja de recibir ella.
Lee más | "¡Yo también existo!": la feroz interna entre las princesitas de Holanda que preocupa a Máxima Zorreguieta
La joven es quien sucederá a su padre, el rey Guillermo, en el trono. Sin embargo, ni su título nobiliario la cuida de la maldad de los usuarios quienes la apodaron "la princesa con sobrepeso".
No sólo se burlan de su cuerpo, sino que están atentos a cada uno de los atuendos que elige para sus pocas apariciones públicas. De hecho, en unas vacaciones de invierno, muchos notaron que la princesa usó la misma campera que su madre lució cuando estaba embarazada de siete meses de su hija menor, Ariana.
Alertados por cómo pueden afectar estos comentarios al desarrollo de la personalidad de su futura reina, muchos medios holandeses no ahorran calificativos positivos cada vez que escriben sobre ella. "Es la princesa sol. La chica más linda del país", publican.
Parecería que el asunto viene de familia: Máxima también sufrió por su físico a lo largo de su vida, algo que la argentina nunca se calló en entrevistas. Incluso, reveló que sus primos la apodaban "la gorda", por tener algunos kilos de más.
Alexia, por su parte, tiene catorce años y es uno de los miembros más carismáticos de la Corona holandesa. Extrovertida, simpática y extremadamente coqueta, la segunda hija de Máxima comenzó a levantar el perfil en los últimos meses. No sólo se conoció que su aspiración es ser actriz y modelo, sino que ahora acompaña más a su madre en distintos actos oficiales. ¿El motivo? La argentina tomó nota de un fuerte reclamo que le hizo su hija, luego de que la familia se mudara al Palacio de Huis Ten Bosch.
Lee más | Bullying real: la depresión de la hija de Máxima porque le dicen "gorda"
"¡Yo también existo!", le habría espetado Alexia a Máxima. Según la prensa holandesa, la princesita pasa horas en Internet y está obsesionada con la atención que recibe su hermana mayor. "Guillermo pasa muchas horas al día con ella con el objetivo de que pueda ver en qué consiste el rol que deberá cumplir en algunos años. También está con sus otras hijas, pero es cierto que gran parte de la agenda es ocupada por la preparación de la primogénita", destacan.
La formación de la futura reina es una de las obsesiones de los reyes, pese a que son cuidadosos a la hora de no hacer diferencias con sus otras dos hijas. “Sabe que está en una situación privilegiada y es esencial que pueda desarrollar su propia personalidad como cualquier niño. Por eso no la educamos de forma distinta a sus hermanas Alexia y Ariana”, advirtió el rey tiempo atrás.
