Big Bang! News
Más

Feroz ataque troll anti Tinelli: "Es una campaña de 600 lucas financiada por el macrismo"

En 2015 surgieron los primeros cortocircuitos del conductor con Mauricio Macri por el lugar que el conductor le dio a Daniel Scioli en el Bailando por un sueño de aquel año. La información fue dada a conocer en Argenzuela. 

26 Julio de 2022 16:50
TXJ6OLQ2SJGJZCNO7JQYETBYCM
TXJ6OLQ2SJGJZCNO7JQYETBYCM

El regreso de Marcelo Tinelli a la televisión argentina después de siete largos meses generó un gran revuelo, sobre todo en las redes sociales. De hecho, fue tan grande el revuelo que se generó alrededor del retorno del hombre de Bolivar a la pantalla chica que no tardó en instalarse el hashtag #ApagónATinelli impulsado por el usuario @indignadoxd y replicado por cientos de otras cuentas en Twitter. "Es una campaña de 600 lucas o 2 mil dólares financiada, según le cuentan a Tinelli, desde la oposición macrista por este señor, Marcos Peña, que es el cerebrito que maneja todo esto", detalló, este martes, Jorge Rial en su programa Argenzuela, ciclo que se emite por la pantalla de C5N.

De acuerdo a la información dada por el conductor, los trolls que en las redes sociales manejan Marcos Peña y Hernán Lombardi atacaron a Marcelo Hugo antes, durante y después del comienzo de su nuevo programa: "Canta conmigo ahora", programa que marcó 15,1 puntos de rating en promedio, una muy buena cifra, dentro de los parámetros que tanto Tinelli como el canal esperaban para el arranque del flamante big show. "Se paga en efectivo a los tuiteros y con criptos a los bots. Los bots son de tres países puntualmente contratados y alquilados: India, Pakistán y Rusia", contó, a su turno, Diego Bracatelli.

Según la información dada en Argenzuela, el hashtag contra el conductor del Trece nació o, mejor dicho, se activó India, Pakistán y Rusia. "De ahí surgen la mayor cantidad de bots que se contratan", agregó el panelista, a lo que Rial exclamó: "¡No sale de Buenos Aires! Ahí ni saben quién es Tinelli. Se arma desde esos tres lugares". En ese momento, Brancatelli explicó que se trata de dos canales que van en "paralelo": por un lado, los tuiteros "reales" y por el otro los "bots". "Para contratar a los tuiteros de carne y hueso tienen que calificar con más de 50 mil seguidores y tienen identificados a 62 que a la misma hora lanzaron el mismo mensaje (#ApagónATinelli), explicó. 

Además, señaló que a su vez tienen subcontratados a "otros tuiteros, en su mayoría liberales y macristas, muy famosos y que han trascendido" en las redes sociales y la televisión. "Una de las agencias tiene el nombre de un país de Europa que paga permanentemente el Gobierno de la Ciudad. Compra tuiteros y bots, y lo maneja la Ciudad de Buenos Aires. Marcos Peña es el que supervisa todo y si bien está un poco alejado, sin el aval de él esto no sale. Él es el coordinador y el que maneja todo este tipo de actividades. Para ellos, esto es un vuelto. A nosotros no aparece mucha plata, pero esta es una acción chiquitita. Me dicen que hasta mal utilizada porque fue dinero tirado en vano", resaltó Brancatelli.

El periodista insistió al señalar que la empresa contratada por el macrismo para llevar a cabo estas maniobras paga "entre 30 mil a 40 mil pesos a los tuiteros". "Después con los bots es un paquete general que parece mucho, pero en realidad es poco. Son unas máquinas que lo hacen todo de forma automática, no hay gente detrás de todo esto y son máquinas que tienen un algoritmo que hace que se reproduzcan, se vayan retuiteando y generan este tipo de respuestas", agregó. "Yo no miro Tinelli"; "ni olvido ni perdón" o directamente pidiendo por la censura del conductor fueron algunas de las frases más utilizadas en la campaña en su contra .

De los "exiliados por CFK a Mendoza" a la "empleada macrista de Donda": las fake news que arengan los trolls

 

Sin embargo, el programa de Tinelli en su debut, compitiendo con el tanque de Telefe, La Voz Argentina, fue más que auspicioso, porque ganó su segmento y fue lo más visto del día. Canta conmigo ahora lideró prácticamente durante la hora y media que duró el programa y solo sobre el final el ciclo que conduce Marley estuvo cerca o algunos minutos arriba en el rating. El enojo de Mauricio Macri con Marcelo Tinelli data de hace casi siete años. Todo comenzó en la noche del jueves 23 de octubre del 2015 al filo de la veda electoral. Para sorpresa de todo el mundo, pero especialmente del ex presidente, Daniel Scioli apareció en el estudio de Showmatch de la calle Olleros, acompañado de Karina Rabolini.

Ese día se dijo que el actual Ministro de Producción pasó junto a su entonces pareja para saludar a "Marcelo y al jurado". El clima del diálogo fue ameno y amable. Nadie le cuestionó nada al candidato peronista a horas de la elección. Macri nunca le perdonó a Tinelli el haber llevado esa noche a Scioli y que el haya tenido que enterarse como cualquier espectador mirando televisión. Imitaciones, trolls rabiosos y frases picantes. Al parecer, el culebrón por el enfrentamiento entre ambos siguió hasta que el ex mandatario recibió al conductor en la Quinta de Olivos. ¿Lo llamativo? Aquel encuentro sucedió luego de que la disputa se intensificara con un nuevo ataque anti Tinelli en Twitter, bajo el hashtag #apagonatinelli.

Sí, el mismo que emplearon en esta oportunidad. En aquel momento, el ex jefe de Gabinete Marcos Peña le había bajado el tono al conflicto: "Marcelo es buena leche, no tenemos nada contra él", había dicho en una conferencia de prensa en la Casa Rosada. "Es increíble que se ofenda. Tinelli me satiriza de mala manera ante tres millones de personas en televisión y se ofende porque lo critican 30.000 tuiteros", fue la frase de Macri en una nota con Joaquín Morales Solá.  Hasta ese momento, la reconciliación entre el hombre de la tevé más influyente del país y el Presidente era un hecho: estaba previsto que fumaran la pipa de la paz en la Quinta de Olivos. 

"Satisface a Mauricio" y "enorme caricia": los bots que expusieron la campaña tuitera de Macri

 

Pero el enojo del creador de Showmatch llegó a poner en riesgo el reencuentro, aunque más tarde las aguas se calmaron. La trama secreta de aquella cumbre se había agudizado con la polémica imitación de Freddy Villarreal y los tarifazos. El humorista interpretó a un Macri dubitativo, torpe, obsesionado con la calefacción y hasta en calzoncillos. No es ningún misterio: una parodia en Showmatch puede catapultar a un político (Fernando de la Rúa yéndose por la puerta equivocada) o hacerlo más conocido hasta en sus peores latiguillos, como pasó en 2009 con Francisco De Narváez. "Bajarle los pantalones a un Presidente ante 20 puntos de rating es muy fuerte", analizaron por aquel entonces.

 

Es más, hubo un llamado de Marcos Peña y otro de Quintana al entorno del conductor para que la relación entre Macri Tinelli no se resquebrajara. Para colmo, Tinelli criticó al macrismo por lo que consideraba una campaña tuiteara en su contra bajo el hashtag #tinellimercenarioK. Y su enojo, tal y como pasó ahora, aumentó cuando le llegó un estudio que confirmaba sus sospechas: que detrás de esa andanada en su contra en las redes sociales habría sido obra del Gobierno.

Chiche Gelblung liquidó a Alfredo Casero por su comportamiento en redes sociales: “Es un pelot....”

 

Al final, la reunión se gestó a partir de los hombres más cercanos a ambos. "Tienen que verse para limar asperezas", decían. Es más, allegados a Tinelli le pidieron al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, que hablara con Macri para tantear el panorama. Fue entonces que Larreta se reunió con Macri y salió con una sonrisa. Y a Tinelli le llegó este mensaje: "Marcelo, con vos está todo bien".

Al rato, Macri lo llamó a Tinelli y acordaron verse en Olivos. Allí, hicieron las paces e incluso se habían mostrado muy divertidos en las redes sociales, especialmente en Snapchat, la app que fue furor en ese momento. De hecho, jugaron con el programa Face Swap que les permitió “intercambiar” sus rostros. Pero poco antes de las elecciones que terminaron con Alberto Fernández como presidente, Tinelli dejó de hablar con Macri, rompía todo vínculo y empezaba a tejer relaciones con el PJ federal, en plena campaña electoral, relación que tampoco terminó muy bien. Esto se debió a varias promesas incumplidas del macrismo. "Las cosas cambiaron", le habría dicho Rodríguez Larreta al conductor en enero de 2019. 

10