18 Junio de 2025 11:08

El futuro de la seguridad aérea en Argentina está en juego. La Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) enfrenta una nueva ola de despidos que responde al plan de ajuste del gobierno de Javier Milei, liderado por el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger.
En este contexto, el gremio ATE-ANAC convocó a un paro para este jueves 19, entre las 6 y las 12 horas, lo que podría generar serias complicaciones en los vuelos del próximo fin de semana largo.
La consigna "La seguridad no se negocia" se convirtió en el grito de lucha de los trabajadores que ven con preocupación cómo el recorte presupuestario y la reducción drástica de personal ponen en riesgo la operación segura de los aeropuertos del país. En esta ocasión, el conflicto se agudizó con la decisión de no renovar los contratos de 28 inspectores especializados, quienes desempeñan funciones críticas para garantizar la seguridad operacional.
Desde la intervención en la ANAC en julio del año pasado, el ajuste es constante. Según datos oficiales, ya se dieron de baja alrededor de 100 contratos en menos de un año. La reciente designación de Oscar Villabona como titular del organismo, tras la salida de Julia Cordero, parece haber reforzado la línea dura del gobierno nacional en su política de achicamiento estatal.
El gremio denuncia que estos despidos no solo afectan a los trabajadores y sus familias, sino que también comprometen gravemente el funcionamiento del sistema aeronáutico: "Los responsables políticos de esta decisión actúan de manera perversa con trabajadores que han sostenido con compromiso y profesionalismo un sistema estratégico para el país", expresó Marcelo Belelli, titular de ATE-ANAC, en un comunicado oficial.
La reducción del personal técnico y especializado contradice directamente las recomendaciones de la Organización Internacional de Aviación Civil (OACI), que establece estándares estrictos para garantizar la seguridad aérea. Según ATE-ANAC, el gobierno está actuando con total irresponsabilidad al prescindir de inspectores clave sin evaluar las consecuencias operativas ni el impacto en la seguridad de las terminales aéreas.
"La decisión política de avanzar con la motosierra en un ámbito tan sensible como el aeronáutico es una muestra clara del desprecio por la seguridad y por los estándares internacionales que nos posicionan como un país confiable en materia aérea", agregó Belelli.
Los trabajadores también advierten que esta política genera precarización laboral pero también expone a los pasajeros y operadores a riesgos innecesarios: "El ajuste brutal pone en peligro la vida humana y afecta gravemente la imagen internacional de Argentina", concluyó el líder gremial.
El paro anunciado para este jueves 19 entre las 6 y las 12 horas será una medida de fuerza contundente para visibilizar el conflicto. Aunque los trabajadores intentaron abrir canales de diálogo con las autoridades para evitarlo, hasta el momento no recibieron respuestas satisfactorias. Desde ATE-ANAC advierten que si no hay una marcha atrás con los despidos y se garantiza la estabilidad laboral, las medidas podrían intensificarse en las próximas semanas.
Así las cosas, el impacto del paro podría sentirse especialmente durante el fin de semana largo, cuando miles de argentinos planean viajar por el país o al exterior. Las demoras y cancelaciones serían inevitables si no se llega a una solución antes del jueves.