04 Octubre de 2015 16:49

El mundo sigue siendo un lugar injusto y desigual, pero hay algunas esperanzas. Hoy se difundió una proyección optimista del Banco Mundial: el número de personas que sufren de pobreza extrema se reducirá este año a 702 millones, el 9,6% de la población mundial. La buena noticia es que, por primera vez en la historia de la Humanidad, esa cifra será menor al 10% de la población.
El coeficiente de Gini, medida de la desigualdad mundial.
Para sobrevivir en las zonas más pobres se necesitan dos dólares al día. Una cifra que parece escasa, pero todavía difícil de alcanzar en decenas de países. Tanto es así, que el BM no se mostró optimista en relación a la miseria, que reconoció que será muy difícil erradicar antes de 2030. La población atrapada en esa situación llegaba a 902 millones en 2012, el 12,8% de los habitantes del planeta.
La miseria, un flagelo que será difícil erradicar.
Los motivos de las mejoras en las cifras pasan por el crecimiento de países emergentes, en especial la India, principal contribuyente a la mejora en los niveles de pobreza. Además, América Latina es la región que más personas incorporó a la clase media.
India, motor del crecimiento pero aún enclave de miseria.
Como obstáculos, asoman la moderación del crecimiento global, la volatilidad en los mercados, el desempleo y la amenaza creciente del cambio climático. También influyen el alza de tipos de interés en Estados Unidos y la moderación del crecimiento en China.
La mitad de la pobreza mundial está en el África Subsahariana, donde habrá 347 millones de personas viviendo con menos de 1,90 dólares a final de 2015. Asia meridional es la segunda región más castigada, con 231 millones. la sigue el Pacífico asiático, con 83 millones.